No apto para menores x3~!

Despues de escribir y escribir entries, he llegado a un numero de esos ke merecen un punto y aparte, esta es mi entry "69" numero que los de mente pervert luego luego lo relacionamos con la posicion sexual del kamazutra, pues con motivo de esta entry les pondre la que fue mi primer historia erotica, espero que sea de su agrado asi que comentenla:

"SOLO UNA NOCHE"

Las sombras caían entre el espeso bosque, mientras la ultima luz del atardecer se ocultaba entre las montañas. La solitaria figura de un joven caminaba por entre los viejos troncos. Había recibido una carta en su buzón, no estaba sellada por el correo, lo que indicaba que había sido entregada de forma personal. Era de una chica, lo sabia, posiblemente de esa compañera de la escuela que tanto tiempo habían llamado su atención.
Llega al árbol indicado por la nota y se recarga a esperar, los minutos pasan y nadie acude a la cita. Decepcionado y con amargura, arroja el papel al suelo y se dispone a regresar a su casa a lamentarse por su inocencia. Escucha un murmullo tras del árbol y se detiene en seco. Rápidamente estira su mano y jala a la persona que se oculta, pensando en alguno de sus compañeros de clases.

Resulta ser el delicado brazo de la joven mas hermosa que había visto hasta entonces, no era su compañera de clases, no era alguien desconocido para el. La jala hacia la tenue luz de la luna, que se filtra entre las ramas de los árboles y contempla sus ojos claros.

Las palabras no quieren salir de los labios del joven, hay algo que se lo impide, la sorpresa tal vez, o el miedo a ser victima de una broma nuevamente. La chica acaricia su rostro con ternura y le murmura suavemente.

-Te estaba esperando... y cuando te vi llegar, me dio pena hablarte, lo siento.

-No te... conozco verdad-pregunta el joven sin quitar la vista de sus ojos.

-No me recuerdas, pero yo a ti si, te he estado observando desde hace tiempo.. mucho..

-pero, porque hay algo que me quieras decir- nerviosamente se da cuenta que todavía la sujeta de la muñeca, así que la suelta. Ella inmediatamente toma su mano entre las suyas y la deposita en su calida mejilla.

-Tócame... siempre quise sentir tus manos.

Temblorosamente recorre su rostro, sorprendido de su perfección. Nunca había visto criatura tan bella y sabia que nunca la vería nuevamente. Un deseo de tocar sus labios lo invadió, se sentía en medio de una magia que le impedía razonar... solo existía ella en el mundo.

Toma su rostro con ambas manos y cubre sus labios con su boca, probando su dulce sabor.

La joven inmediatamente se abraza a su cuerpo, recorre su espalda con sus manos de seda, haciéndolo vibrar. El también recorre su espalda con timidez, con miedo de asustarla. Ella se separa del beso unos instantes y le repite.

-Tócame... déjame sentir tu calor... déjame ser.. tuya... solo esta noche.

Lo vuelve a besar con gran pasión, no permitiéndole reaccionar a sus palabras. Siente su frágil cuerpo pegado al suyo, como su calor lo invade también a el a trabes de sus pechos. En ese momento, aun con un poco de miedo, sus caricias se volvieron mas firmes aun. Sin pensarlo una de sus manos se deslizo sobre uno de sus senos y lo acaricio con soltura.

Ella lo miro dulcemente sonriendo, invitándolo a continuar. Dejo de besarlo en los labios solo para continuar en su cuello, rozándolo con sus labios y depositándolos en el lóbulo de su oído. Un ligero mordisco lo excitó y ya no hubo marcha atrás. Con un movimiento metió ambas manos bajo su blusa, notando con emoción como debajo no llevaba nada, solo su suave piel.

Emocionado la despoja de la blusa y la recarga en el tronco del árbol donde estuvo esperándola tanto tiempo. Sus manos acarician ambos pechos mientras siente como ella continua besando su cuello y oído, cuando sin pensarlo, se inclina un poco y lame con suavidad uno de los pezones de la chica, arrancándole un débil gemido. Ese sonido lo hizo continuar lamiéndolo sin cesar, besándolo, succionándolo para probar ese sabor que nunca imagino. La chica se abandono a el, acariciaba su cuerpo y lo besaba, pero el placer que le estaba dando la tenia en un creciente extasis.

Sin saber como, baja su mano y la pasa por debajo de su falda, acariciando sus piernas y subiendo a sus glúteos. Siente la delicada ropa interior y pasa su mano en su entrepierna, para acariciarla con mucha suavidad por encima de la tela de la prenda. Los gemidos de la chica se volvieron mas fuertes aun, y se abrazo aun mas a el conforme aumentaba el movimiento de sus dedos. Mientras con la otra mano la despoja de la falda.

La aleja unos momentos de el para apreciarla, solo vestida con sus pantys, ahora humedecidas por su excitación. Se arrodilla ante ella y descubre un poco su parte, tratando de no asustarla, al ver su mirada tímida pero feliz. Con una sonrisa besa su vientre y luego baja a su entrepierna, lamiendo delicadamente, sintiendo su pasión. Toma una de sus piernas y la levanta sobre su hombro, teniendo aun mas acceso a esa parte intima, que recorre milímetro a milímetro con su lengua.

Ella comienza a desvestirlo también, quitándole su playera y acariciando su joven cuerpo con sus manos. El se despoja a su vez del resto de la ropa, notando su miembro excitado también. De un tirón arranca la ropa interior de la joven y recorre sus partes con sus dedos, explorándola, viendo como su humedad le indica que esta lista para el. Se pone de pie y la besa con suavidad, rozando su parte con la de ella.

-Estas.. lista- le murmura al oído.

-Siempre.. lo he estado, amor.- Lo besa nuevamente invitándolo a continuar.

El la recarga en el árbol y se acomoda, entrando en ella con lentitud, disfrutando de su calidez, sintiendo como lo envuelve. Da una ligera embestida y la joven lanza un profundo gemido de dolor. El se retira casi de inmediato, sorprendido al darse cuenta que era virgen, apenado por haberla lastimado. Ella sonríe nuevamente y acaricia su pecho. Se le abraza y toca su parte con la de el, indicándole sin palabras que continúe.
Nuevamente con cuidado, entra en ella y se mantiene un momento así, esperando que ella le indique continuar. Ella lo hace con un ligero movimiento de sus caderas.

La besa con una gran pasión y comienza a moverse, primero lentamente y después aumentando su ritmo. Ella lo abraza, gimiendo en una mezcla de dolor que termino convirtiéndose en el mayor de los placeres.

Después de unos momentos, se separa de ella.

-Te.. te molestaría.. hacer lo mismo que te hice- le murmura mirando hacia el suelo, aun apenado por atreverse a pedirle semejante cosa. Esperaba una negativa al notar su silencio y mira hacia un lado, avergonzado.

La respuesta llego momentos después, cuando sintió un delicado contacto en su miembro. Volteo rápidamente la vista y con sorpresa la vio lamerlo con una gran suavidad. Acaricia su cabello y se deja llevar por los labios de la joven, quien ahora recorre de arriba a abajo su parte y la mete en su boca, probando su sabor. El cierra los ojos, siente que no puede resistir mucho, es demasiado placer y se esfuerza por controlarse. Pero al sentir la lengua de ella acariciarlo dentro de su boca y como empezó a succionar con suavidad, no pudo resistir nada mas. Con un gemido profundo comenzó a venirse en su boca, manchando su rostro al retirarse.

Apenado se arrodilla frente a ella y lame su cara, limpiándola.

-Lo.. siento, pequeña.. no pude...

-Esta bien.. no me molesta..-Sonríe nuevamente y acaricia su rostro.

El la abraza y siente como la mano de ella se desliza hacia su parte y la acaricia. Se da cuenta que ella no ha terminado aun, y que es su forma de pedírselo.

La coloca en cuatro, y se pone detrás de ella. Lame y besa su parte durante largo rato, hasta que siente que su deseo a crecido de nuevo. Toma su miembro y recorre la parte de la joven lentamente, antes de entrar en ella de golpe. Lo recibe con un gemido profundo y se abraza al tronco del árbol, resistiendo sus embates, ahora fuertes y salvajes.

Se agacha y besa su espalda mientras sus manos acarician ambos pechos y su ritmo se vuelve frenético. Siente terminar nuevamente, pero resiste, hasta que escucha a la chica agitarse aun mas, escuchar sus gemidos mas profundos.

-Juntos... amor.. por favor.. los dos juntos.- le murmuro entre jadeos y el apretó los dientes, aumentando la fuerza de sus embates, buscando el placer de ella- .

En un momento siente el cuerpo de la joven contraerse, y luego lanzar un profundo grito de placer. Siente sus contracciones y su creciente humedad y termina junto con ella, lanzando otro gemido y abrazándose a su espalda, sintiendo un gran placer y una extraña perdida de fuerzas.

Besa su espalda unos momentos sin retirarse de ella, queriendo sentir por siempre su calor. Ella es la que se separa primero, solo para recostarlo en el suelo del bosque y besarlo unos momentos. Se recarga en su pecho y lo acaricia murmurando un extraño "gracias".

-No... al contrario.. muchas gracias a ti... por... - sus ojos comienzan a cerrarse, pesados. Un extraño sueño lo invade y queda profundamente dormido, sintiendo los besos de ella en su rostro.

Despertó una hora antes del amanecer, débil y desorientado. Noto como estaba desnudo y rápidamente se vistió, pero no encontró señales de la joven. Solo un trozo de su ropa, arrancado por algún arbusto al momento que se retiraba.

No la volvió a ver jamás. Pero aun sigue visitando ese lugar todas las noches a la misma hora. Conoce cada uno de las marcas en el tronco del viejo árbol, y nota una calidez familiar cada vez que toca su arrugado tronco, como si los recuerdos del pasado hubieran quedado grabados en el.